martes, 23 de octubre de 2012

Jugo de Zanahoria


   Un mamarracho en el espacio // un espiral en el ascensor // un crucigrama en el desierto. Let the music take us! La luz tenue, de lejos un sol, cerca un tumulto, un pizarrón. Elegir.
   En tránsito // trance // transición. Ocho mil quinientos veinte y ocho kilómetros: raíces // vínculo // cercanía. Otra vez empezar y querer cortar. Un simple recreo inesperado // anticipado // misterioso. ¡Metete el arma en el orto!
   Un antihéroe demencial con un pulóver del Acertijo, sin nave ni bastón, adiós a la preocupación ¡rock! México y Alemania no tienen nada que ver ¡Mentira! Dos segundos, antes los vidrios chocan y a girar en el pozo. Un cowboy de anteojos // un hechicero aniñado // un icono pop. Tres segundos, ni el fuego te salvó.
   Un paseo en monopatín // skate // tranvía. No importa porqué, sólo la bomba: el resplandor que te hace levitar tras un día agitado. Es raro, pero un intercomunicador del futuro provoca aproximación // contacto // conocimiento.
   Segundos // minutos // horas. Las palabras caminan, los verbos se hacen los graciosos y las letras intentan encajar. A la marchanta (o no): la elección. Cuatro segundos: el ardor // poder // transportación. Un veneno matemático // de otra procedencia // de una composición desconocida.
   Dinamita directa al hígado, pero no a lo pies, la comedia musical es en Júpiter. ¡De que te reís, si vos preferiste la playa! Las costillas quieren tocar la batería, quizás un jazz, pero del demonio. Te pica el pelo y se complica respirar. A veces no hace falta hablar // ni reír // ni llorar. Conexión, la más vieja, razonable y encantadora de éstas.
   ¡Preparen la pista de baile! Pero si no sabes bailar, pero puede ser una película, ahí todo se puede. Nunca viene mal una sonrisa. Escenario de amanecer, pero si es muy temprano. Artificial // delator // salvador.
   Alguien filma de lejos, creo que un rinoceronte en un platillo volador, musicaliza un zorro con un toc toc. Unas baldosas mojadas // movedizas // sagradas. Un misterio sin resolver en el portal del limbo, pero ya no importa, o mejor dicho a quién le importa si fue así y fue rock.